En la actualidad, las redes sociales juegan un papel fundamental en la vida de los y las jóvenes, siendo espacios de interacción, entretenimiento y, en muchos casos, de búsqueda de identidad. Sin embargo, también pueden convertirse en plataformas donde se comparten y fomentan conductas preocupantes, como las autolesiones no suicidas (ANS). Gracias a la guía «abre los ojos ante las autolesiones en redes sociales» podemos acercarnos a este fenómeno tan desconocido.
Por supuesto, lo primero es lo primero, descárgate la guía en el siguiente enlace: Descarga la guía aquí.
¿De dónde surge esta guía?
- Esta guía es realizada por el grupo de investigación Comkids de la Universidad Rey Juan Carlos:
- Esther Martínez Pastor ( Universidad Rey Juan Carlos)
- Miguel Ángel Nicolás Ojeda (Universidad de Murcia)
- Marian Blanco Ruiz (Universidad Rey Juan Carlos)
- Raquel Moraleda (Investigadora independiente)
¿Por qué hemos elegido esta buena práctica?
Hemos decidido traer esta buena práctica a nuestro club digital por varios motivos. Porque nos parece una iniciativa muy interesante que ayuda a las personas que trabajamos con jóvenes a entender y a saber que dentro de las redes sociales existen códigos, conductos y lenguajes propios en el que los/las jóvenes se retroalimentan y, en lugar de apoyarse para salir de la circunstancia que les hace autolesionarse, se apoyan para cruzar límites cada vez más preocupantes. Y, por otro lado, porque La Rueca Asociación hemos colaborado en la elaboración de la misma (de forma muy pequeña) a través de las entrevistas realizadas a diferentes profesionales de la entidad.
Vamos a entender los conceptos ¿Qué son las autolesiones no suicidas?
Las autolesiones no suicidas se refieren a conductas en las que una persona se provoca daño físico sin intención de acabar con su vida. Aunque puedan parecer alarmantes, es importante no confundirlas con intentos suicidas. Para muchos y muchas adolescentes, las ANS se utilizan como un mecanismo para lidiar con emociones intensas como la ansiedad, el estrés o la frustración, generando una liberación momentánea del dolor psicológico.
El papel de las redes sociales en las autolesiones
Las y los jóvenes recurren a las redes sociales para compartir sus experiencias sobre autolesiones con otros/as usuarios que atraviesan situaciones similares, buscando comprensión y apoyo. En plataformas como Twitter, Instagram y TikTok, se crean comunidades y grupos que comparten contenidos sobre estas conductas, a menudo utilizando códigos y lenguajes específicos que resultan difíciles de identificar para los adultos.
El anonimato que ofrecen las redes sociales puede darles una falsa sensación de seguridad, fomentando la normalización de las autolesiones y contribuyendo a que se perpetúe esta conducta.
Códigos ocultos y cómo identificarlos
Los contenidos relacionados con las autolesiones en redes sociales suelen estar codificados mediante palabras clave, abreviaturas e imágenes simbólicas que a primera vista no parecen estar relacionadas con esta problemática. Términos como «barcode» (código de barras) o «bl00d» (sangre) se utilizan para referirse a cortes autoinfligidos. Es vital que todas las personas que rodean a estos chicos y chicas se familiaricen con estos lenguajes para poder detectar a tiempo estas señales de alerta.
Así, la guía aplantea algunas buenas prácticas para prevenir el riesgo en redes sociales:
Educación y diálogo abierto. Es fundamental que los adultos mantengan una comunicación abierta con los jóvenes sobre el uso de las redes sociales, abordando los riesgos asociados a las autolesiones y fomentando un uso más positivo y saludable de estas plataformas.
Monitorización y prevención. Aunque las redes sociales tienen políticas restrictivas sobre la promoción de autolesiones, los usuarios encuentran formas de evadir estos controles. Por ello, es importante que los adultos estén alerta a los cambios de comportamiento y los posibles códigos utilizados por los jóvenes.
Promoción de recursos de apoyo. En caso de detectar señales de autolesiones, es crucial proporcionar acceso a profesionales de la salud y a organizaciones especializadas que puedan ofrecer apoyo adecuado.
Contáctanos si lo necesitas
En La Rueca, continuamos trabajando para crear entornos digitales seguros y positivos para los y las jóvenes, promoviendo un uso consciente y responsable de las tecnologías. Si deseas más información o necesitas apoyo, puedes visitar nuestro Centro Social Virtual, donde ofrecemos atención psicológica gratuita. De hecho, nuestro centro social virtual e-rueca es uno de los recursos que se nombran en la guía para pedir ayuda
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