¿Pensabas que la basura que generas es sólo esa que da tanta pereza bajar? Pues lamentamos comunicarte que generamos mucha más basura de la que pensamos…(que no es poca) pues todas nuestras acciones en el universo tecnológico dejan huella y generan contaminación y basura… ¿Quieres saber cómo es posible? Te lo contamos todo en el siguiente post.

Internet está en todas partes y parece que pueda abarcarlo todo, infinito. Pero nada más lejos de la realidad: Internet son los servidores (ordenadores) donde se almacenan nuestros datos, los routers y switchs que redirigen nuestras búsquedas de información (como por ejemplo desde google) hacia el centro de datos adecuado. En definitiva, Internet lo soporta una amplia infraestructura de sistemas interconectados, y todos ellos requieren de un consumo de electricidad para funcionar. En concreto, y según la revista Science, Internet supone el 1% de todo el gasto eléctrico mundial. Y en cuanto a CO2, estamos hablando de la décima industria en total de emisiones, estando ¡3 puestos por encima de la industria de aviación!

Contaminando más que la aviación

Sí, has leído bien: Internet contamina más a nivel global que la industria de la aviación. Al fin y al cabo, son cientos de miles de aparatos eléctricos los que se requieren para almacenar toda la información que diariamente generamos, y que no es poca: en el mundo, se estima que se envían 100.000 millones de whatsapps al día. Constantemente estamos creando perfiles en nuevas redes sociales, y abandonando muchos otros en redes que ya se usan menos. Subimos fotos y stories casi a diario. Constantemente nos registramos en webs de compras, aunque después quizá sólo compremos una vez en ellas. Otro dato: una persona produce cada año 135Kg de CO2 tan sólo por culpa de su correo electrónico.
Otra forma de basura digital es el exceso de información o noticias, incluyendo dentro de estas las “fake news” o noticias falsas. La Inteligencia Artificial lo pone muy fácil para la generación de este tipo de contenidos en masa, y esto sólo aumenta la cantidad de basura digital que generamos.

Parece que ya vamos viendo que la basura digital causa un daño directo en el mundo analógico. Por suerte, la solución del problema depende de nosotros tanto como la causa del mismo. Como sociedad, tenemos el reto colectivo de ser más higiénicos y economizadores en términos ecológicos.

Algunos Consejos

Cada granito de arena que podamos aportar suma, y entre otras existen las siguientes acciones que pueden ayudarnos a reducir esa basura digital:

  • Eliminar lo innecesario, como es simplemente vaciar la carpeta de spam, la bandeja de entrada, la papelera, la bandeja de enviados…
  • Cancelar suscripciones email que realmente ni prestamos atención
  • Evitar firmas que incluyan GIF’s o imágenes
  • Evitar emails enviados de forma masiva para una simple respuesta que podría darse en persona a un compañero/a de oficina que se sienta a dos mesas de distancia, por ejemplo.
  • No abusar de la nube como si fuera un pozo sin fondo con espacio infinito… su nombre puede inducir a creerlo, pero no deja de ser un conjunto de servidores con discos duros.
  • En cuanto a Whatsapp y Telegram, borrar los chats innecesarios, desprogramar el autoguardado y ser selectivo con los archivos que guardamo : aquí entra en juego la manía de hacer y enviar 10 fotos casi iguales del mismo momento, en lugar de simplemente quedarnos con la mejor.
  • Instalar bloqueadores de publicidad y plugins de verificación de noticias falsas
  • Analizar la información antes de compartirla, para evitar que un bulo se haga viral. Esto supone un derroche de energía y almacenamiento para algo que ni siquiera es real.

 

Entre todos y todas podemos conseguir reducir la basura digital, que ya es un problema real.

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