Design Thinking en el tercer sector by Rocío García Ramos

El Design Thinking es una metodología que ha cobrado mucha importancia en los últimos años debido a su enfoque centrado en el usuario y su capacidad para fomentar la innovación y la creatividad. Las llamadas metodologías AGILE han revolucionado la forma de gestionar los proyectos. ¿Es posible que el tercer sector también las use o queda relegada a empresas del ámbito privado?

Para abordar este tema, durante el mes de Febrero tenemos como partner invitada a Rocío García Ramos, CEO & Innovation Manager de Dinngo Laboratorio de Innovación. Os dejamos su linkedin: https://www.linkedin.com/in/rociogarciaramos/

Rocío nos habla sobre cómo esta metodología puede beneficiar a los proyectos del tercer sector y, por ende, ayudar a mejorar la calidad de vida de las personas. Y como desde dinngo, han conseguido casos de éxito en este sentido. Gracias Rocío, por prestarnos tu tiempo y conocimientos y ser nuestra partner invitada de Febrero. Os dejamos con ella.

Pero antes de profundizar en el Design Thinking, es importante entender su origen y cómo se relaciona con las metodologías Agile.

Las Metodologías AGILE

Las metodologías Agile surgieron en la década de 1990 como una respuesta a los procesos de desarrollo de software tradicionales que se consideraban lentos y poco flexibles. En lugar de planificar y diseñar un proyecto completo antes de comenzar a trabajar en él, las metodologías Agile se basan en ciclos de desarrollo más cortos y en la iteración constante, lo que permite a los equipos responder rápidamente a los cambios en los requisitos del proyecto.

El Design Thinking, por su parte, es una metodología que se enfoca en la resolución de problemas complejos y la generación de soluciones innovadoras a través de la empatía y la comprensión profunda de los usuarios. Esta metodología se basa en una serie de fases que incluyen la comprensión del problema, la investigación, la ideación, la prototipación y la implementación. El Design Thinking se ha convertido en una herramienta popular para la innovación en empresas, organizaciones y entidades gubernamentales en todo el mundo.

Vertientes

Existen varias vertientes del Design Thinking, cada una con su propia forma de abordar el proceso de innovación. Algunas de las más populares incluyen:

• El Design Thinking de Stanford: Esta vertiente del Design Thinking fue desarrollada por la Escuela de Diseño de Stanford y se centra en la empatía, la colaboración y la experimentación. El proceso se divide en cinco fases: empatizar, definir, idear, prototipar y testear.
• El Design Thinking de IDEO: IDEO es una consultora de diseño que ha desarrollado su propia vertiente del Design Thinking, que se enfoca en la investigación y la exploración para generar soluciones innovadoras. El proceso se divide en tres fases: inspiración, ideación e implementación.
• El Design Thinking de Frog Design: Frog Design es otra consultora de diseño que ha desarrollado su propia vertiente del Design Thinking, que se enfoca en la exploración, la experimentación y la creación de soluciones centradas en el usuario. El proceso se divide en tres fases: descubrimiento, ideación y realización.

Beneficios del Design Thinking

Algunos de los beneficios del uso del Design Thinking incluyen:

• Centrarse en el usuario: El Design Thinking se enfoca en comprender profundamente las necesidades y deseos del usuario, lo que puede llevar a soluciones más efectivas y satisfactorias para ellos.
• Fomentar la innovación: La metodología del Design Thinking fomenta la creatividad y la experimentación, lo que puede llevar a soluciones innovadoras que de otra manera no habrían sido consideradas.
• Mejorar la colaboración: El Design Thinking se basa en la colaboración y el trabajo en equipo, lo que puede mejorar la comunicación y la eficacia de los equipos de trabajo.
• Reducir el riesgo: La metodología del Design Thinking incluye la creación de prototipos y la prueba de soluciones en el mundo real antes de su implementación completa, lo que puede reducir el riesgo de errores costosos.

Dinámicas de Design Thinking

A continuación os mostramos algunas de las dinámicas y técnicas de Design Thinking que se pueden utilizar en diferentes etapas del proceso de diseño. Cada dinámica es efectiva para diferentes objetivos y desafíos, y es importante seleccionar las técnicas adecuadas para el problema a resolver.

• Brainstorming: La lluvia de ideas es una técnica muy común y efectiva en el Design Thinking. Esta dinámica permite a los miembros del equipo generar una gran cantidad de ideas en un corto período de tiempo, fomentando la creatividad y el pensamiento divergente.
• Mapa de empatía: El mapa de empatía es una técnica de Design Thinking que ayuda a los diseñadores a comprender mejor las necesidades, deseos, motivaciones y frustraciones de los usuarios. Esta dinámica implica crear un diagrama que describe la experiencia del usuario en profundidad, lo que ayuda a identificar oportunidades para mejorar el diseño.
• Prototipado rápido: El prototipado rápido es una técnica que implica crear prototipos de bajo costo y alta fidelidad para probar y refinar soluciones. Esta dinámica permite a los diseñadores probar ideas rápidamente y recibir comentarios de los usuarios antes de comprometerse con una solución costosa y definitiva.
• Escenarios futuros: La creación de escenarios futuros es una dinámica que permite a los diseñadores explorar posibles futuros y considerar cómo sus soluciones podrían ser afectadas por cambios en el entorno. Esta técnica ayuda a los diseñadores a pensar en soluciones a largo plazo y a considerar los posibles impactos futuros de sus soluciones.
• Design Sprint: El Design Sprint es una metodología de Design Thinking que implica un proceso de cinco días para resolver un problema de diseño complejo. La dinámica implica trabajar en equipo para crear y probar prototipos, recibir comentarios de los usuarios y mejorar la solución a lo largo de cinco días intensivos.

Estas son solo algunas de las dinámicas y técnicas de Design Thinking que se pueden utilizar en diferentes etapas del proceso de diseño. Cada dinámica es efectiva para diferentes objetivos y desafíos, y es importante seleccionar las técnicas adecuadas para el problema a resolver.

Libros y Recursos Web

Algunos de los libros que pueden ser útiles para aprender más sobre el Design Thinking incluyen:

1. «Design Thinking para la innovación estratégica» de Idris Mootee. Este libro presenta una guía completa para aplicar el Design Thinking en la innovación estratégica en las empresas.
2. «La solución empática» de Anthony Tasgal. Este libro describe el Design Thinking como una metodología empática para resolver problemas, y ofrece ejemplos y técnicas para aplicar esta metodología.
3. «Diseñando la propuesta de valor» de Alexander Osterwalder y Yves Pigneur. Este libro describe una metodología para diseñar modelos de negocio y propuestas de valor utilizando el Design Thinking.
4. «Design Thinking: el método para innovar con éxito» de Pedro Olivares. Este libro presenta una introducción al Design Thinking y ofrece ejemplos prácticos de cómo aplicar esta metodología en diferentes contextos.
5. «Design Thinking en la práctica» de Michael Lewrick, Patrick Link y Larry Leifer. Este libro presenta una guía práctica para aplicar el Design Thinking en la innovación y el desarrollo de productos y servicios.

Como webs podemos destacar:
1. Por supuesto el blog de Dinngo. https://dinngo.es/blog/ Lleno de grandes ideas, consejos y materiales sobre esta técnica.

2. Design Thinking en en español https://www.designthinking.es/inicio/index.php

3. Guía gratuita para desarrollar un proyecto de Design Thinking. Con plantillas, enlace a videos explicativos, ejemplos, etc: https://dinngolab.es/guia-proyecto-design-thinking

4 Curso de Design Thinking para educadores gratuito de Digital Orange Center. https://cursos.orangedigitalcenter.es/

Aplicaciones de Design Thinking

El Design Thinking se puede aplicar a una amplia variedad de situaciones, desde la innovación de productos y servicios hasta la resolución de problemas complejos en organizaciones y comunidades. Algunos ejemplos pueden ser:

• Desarrollo de productos: el Design Thinking se utiliza a menudo en el desarrollo de nuevos productos o servicios para asegurarse de que estén diseñados teniendo en cuenta las necesidades del usuario. Las empresas pueden utilizar el Design Thinking para crear prototipos y recibir comentarios de los usuarios antes de lanzar el producto al mercado.
• Resolución de problemas de negocios: el Design Thinking puede utilizarse para abordar problemas comerciales complejos. Al centrarse en las necesidades y deseos de los clientes, las empresas pueden identificar soluciones innovadoras que mejoran la experiencia del usuario y generan valor para la empresa.
• Diseño de experiencias de usuario: el Design Thinking se puede utilizar para diseñar experiencias de usuario únicas y memorables. Las empresas pueden utilizar la metodología para entender las necesidades y deseos de sus usuarios y crear experiencias personalizadas que satisfagan esas necesidades.
• Diseño de servicios públicos: el Design Thinking también se puede utilizar para mejorar los servicios públicos. Las organizaciones gubernamentales pueden utilizar la metodología para entender las necesidades de los ciudadanos y diseñar servicios que satisfagan esas necesidades de manera efectiva.
• Desarrollo de soluciones sociales: el Design Thinking también se puede utilizar para desarrollar soluciones innovadoras a problemas sociales complejos. Al centrarse en las necesidades y deseos de las personas afectadas por el problema, los diseñadores pueden crear soluciones que aborden los desafíos de manera efectiva.

Estos son solo algunos ejemplos de cómo se puede aplicar el Design Thinking en diferentes contextos. La metodología es altamente adaptable y puede utilizarse para abordar cualquier problema o desafío que requiera una solución creativa y centrada en el usuario.

Design Thinking en el tercer sector

Definitivamente creemos que el Design Thinking es una metodología valiosa y eficaz para abordar problemas sociales y desarrollar soluciones para entidades sin ánimo de lucro. De hecho, el Design Thinking puede ser especialmente útil en estos contextos, ya que a menudo hay un mayor énfasis en el impacto social y la mejora de la calidad de vida de las personas.

El Design Thinking puede ayudar a las entidades sin ánimo de lucro y a los proyectos sociales a comprender mejor las necesidades y deseos de las personas a las que sirven, lo que a su vez puede mejorar la eficacia de sus programas y servicios. Al utilizar la metodología, estas entidades pueden desarrollar soluciones innovadoras y efectivas que satisfagan las necesidades de sus usuarios de manera más efectiva.

Además, el Design Thinking también puede ayudar a las entidades sin ánimo de lucro a involucrar a las personas a las que sirven en el proceso de diseño y desarrollo de soluciones. Al incluir a los usuarios finales en el proceso de diseño, las entidades sin ánimo de lucro pueden crear soluciones que satisfagan sus necesidades de manera más efectiva y aumentar su compromiso y satisfacción con los servicios y programas ofrecidos.